Historia de la Constitución y de las Propuestas de Nuevas Constituciones

La señora BESSY GALLARDO.- Muchas gracias, Coordinadora.

Buenas tardes a mis compañeros convencionales.

Quisiera referirme primero al orden que le estamos dando al texto constitucional, y relevar una cuestión que me parece muy importante y fundamental en medio de la crisis climática y ecológica que vivimos en Chile, que es precisamente que el capítulo sobre naturaleza y medio ambiente está justamente después de derechos fundamentales.

Entendemos como una grande innovación de esta nueva Constitución a diferencia de la Constitución de 1980, precisamente empezar a hablar de medio ambiente, en una época donde creíamos que obviamente era una cuestión que era inagotable, que los recursos naturales no agotarían jamás, que el agua estaba disponible para todo el mundo.

Hoy día nos encontramos en una de las peores crisis climáticas y ecológicas de nuestra historia como humanidad. Y viene esto a hacer una gran innovación en el derecho chileno precisamente porque reconocemos a la naturaleza, primero como un sujeto de derecho, a propósito de los derechos fundamentales, pero además hacemos el reconocimiento de que las personas y los pueblos son interdependientes con la naturaleza y forman con ella un todo inseparable.

Abandonamos, por medio de esto, esa visión antropocéntrica que tenemos en general, de que el ser humano está por sobre la naturaleza y la maneja, y entendemos, de una vez por todas, desde una Constitución, que efectivamente somos parte de la naturaleza, que somos un mamífero más y que la estamos destruyendo. Hacemos un reconocimiento a la crisis climática y ecológica que vive Chile, y no solamente Chile, probablemente el mundo entero.

Por lo tanto, creo que esto debe ser histórico no solamente para aquellos que creemos que el medio ambiente es una cuestión hermosa, admirable etcétera, sino que de ella depende nuestra vida, la vida de nuestras familias y de nuestras comunidades.

Dentro del capítulo del medio ambiente encontramos estatutos como el del agua, pero además hacemos un reconocimiento de derechos fundamentales en cuanto a que el agua es un derecho humano, por lo cual le debemos a las comunidades la capacidad de tener el agua suficiente para vivir, para que vivan sus animales, para que vivan sus familias.

Creo que es fundamental reconocer y poner en un lugar de preponderancia a la madre naturaleza. Vivimos con ella, somos parte de ella, y, efectivamente, esta es la única casa que tenemos; no podemos irnos a Marte, ni a Júpiter, ni a planetas parecidos al nuestro.

Así es que creo que, más allá de la gran innovación que significa reconocer a la madre naturaleza como sujeto de derecho, que estamos integrados a ella, que somos parte de ella; del estatuto del agua, o de se reconozca que el agua es un derecho humano fundamental, es importante que esta Constitución se hace cargo de lo que las comunidades efectivamente querían, y nosotros nos hacemos cargo de darle el lugar de preponderancia que merece.

Muchas gracias.